De pequeño LA ALDEA era mi segunda casa.
Ver las montañas, jugar en la hierba, las vacas, estar con mi abuela Josefa y comer su tortilla, era todo lo que necesitaba para ser feliz.
Josefa y su tortilla ya no están,
pero todo lo demás sí.
Y estoy yo que me desvivo para que tú también te sientas como en casa y disfrutes de la “tierrina”.
Por cierto, soy Óscar Morán, y aunque toda la vida tuve un bar, no soy ningún experto en turismo rural. Simplemente, quiero compartir contigo un lugar que tiene un enorme valor emocional para mí: la casa de mi bisabuela Dolores en el pueblo de La Aldea, en Asturias.
¿Quieres venir a La Aldea?
LA CASA SE ALQUILA POR SEMANAS COMPLETAS Y TIENE CAPACIDAD PARA 6 PERSONAS
Deja que te cuente algo sobre la casa.
Mi casa rural no es solo una típica casa asturiana.
Es una casa que mi bisabuela Dolores levantó con sus propias manos y gracias al trapicheo.
Bajaba a Laviana a trapichear con los huevos, la fruta, el maíz y los pollos que producía en casa. A cambio se llevaba café, arroz y otros productos que ella no tenía en La Aldea.
Trapicheando y trapicheando consiguió levantar la casa, toda de piedra, allá por el año 1822.
Fue de las primeras en tener una casa con baño dentro.
Te diré, la casa es tan auténtica que todavía conserva el sistema de calefacción típico de la zona. La cocina calefactora de carbón y leña.
Metes el carbón, atizas, y mientras cocinas calientas la casa.
Así lo hizo una señora que pasó unos días en La Aldea en la época de las castañas. Una experiencia genuinamente rural. Y un viaje al pasado, también.
Pero espera, no te equivoques, que aunque suene un poco a Pedro Picapiedra, mi casa tiene todas las comodidades de una casa moderna, pero conservando lo pintoresco de la arquitectura y la decoración típica de la región.
Es más, es muy probable que según llegues ya me estés pidiendo quedarte más. Y es que mi casa rural La Aldea te va a gustar porque…
➔ Podrás venir en familia o con amigos y disfrutar de una absoluta privacidad. La casa tiene 3 habitaciones, capacidad para 6 personas y en el pueblo te cruzarás con un solo vecino.
➔ La desconexión es total, incluso puedes plantearte un digital detox, porque aunque la casa tiene cobertura móvil y 3 televisiones, no dispone de red wifi porque allí no llega.
➔ Al abrir la ventana verás las montañas como Heidi en la casita de su abuelo. Pero aunque estarás apartado, nunca te sentirás aislado. Tienes a un tiro de piedra Gijón, Oviedo, la playa, el Parque Natural de Redes y los lagos de Covadonga. La ubicación es estratégica para conocer la “tierrina” sin perder mucho tiempo en desplazamientos.
➔ Me ocuparé de darte indicaciones para que disfrutes del buen comer, que sé que también vienes por eso.
➔ Vas a vivir una experiencia rural genuina de desconexión que te va a dejar descansado y como nuevo para afrontar con energía la vuelta a tu rutina diaria.
Veamos si lo he entendido bien…
¿Me estás diciendo que voy disfrutar de unas vacaciones de las que volveré completamente renovado, en un alojamiento en el que me voy a sentir como en mi propia casa, viviendo una experiencia rural genuina, y pudiendo visitar el entorno sin necesidad de perder horas en desplazamientos?
Eso es exactamente lo que te propongo.
¿Te espero en La Aldea?
LA CASA SE ALQUILA POR SEMANAS COMPLETAS Y TIENE CAPACIDAD PARA 6 PERSONAS
Espera, no te vayas todavía, quiero que me conozcas un poco más:
● He regentado un bar toda la vida y eso me ha dado la habilidad para tratar con la gente. Es algo con lo que disfruto.
● Soy muy familiar. De pequeño siempre que podía me escapaba a La Aldea con mi abuela Josefa. Y ahora, aunque ya no esté mi abuela, siempre que puedo también voy.
● Me encanta aconsejar sitios para visitar en el entorno de la casa, quiero compartir con todos este lugar que en mi opinión tiene mucho que aportar a personas como tú que vives todo el año con mucho estrés.
● Disfruto de las cosas sencillas: cuidar de mi madre, ir a la huerta, salir al campo, pasear por el monte y respirar aire puro.
● No me gusta tratar con personas conflictivas y, por supuesto, en la casa no quiero huéspedes que vengan a hacer fiestas y me dejen la casa hecha un pifostio.
Dicho esto.
Si tú no tienes ganas de hacer fiestas y lo que buscas es descansar al menos una semana inmerso en la naturaleza, en una casa rural solo para ti, sin que te falte de nada y además, te vayas como nuevo y queriendo repetir…
Eres más que bienvenido a mi casa rural La Aldea.
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